El 17 de julio es la fecha en que deja de tener efecto el DNU por el cual el Gobierno determinó el retroceso a fase 1 en el Área Metropolitana de Buenos Aires debido al exponencial aumento de casos de coronavirus y la consecuente posibilidad de colapso del sistema sanitario. Hasta que las administraciones de Provincia y Ciudad, tomen una decisión sobre cómo seguir a futuro, autoridades de ambos distritos seguirán evaluando posibles flexibilizaciones a la cuarentena en las próximas 48 horas. El jefe de Gobierno porteño y el Gobernador bonaerense mantuvieron un encuentro a solas en la sede de Uspallata. Tras innumerables cruces y momentos de tensión a lo largo de estos cuatro meses de aislamiento, llegaron a la conclusión de avanzar en una salida coordinada de la cuarentena. “Si los números acompañan, la idea es empezar a desandar gradual y cuidadosamente la cuarentena, que bien puede realizarse en forma diferenciada”, manifestaron desde el entorno de Larreta. Según los funcionarios: “Se cumplió razonablemente bien con la cuarentena estricta de esta etapa y, en general, cayó la curva de circulación con respecto a semanas previas; los resultados de esta etapa los vamos a ver la semana que viene”. Con el objetivo de concretar la salida coordinada a partir del 18 de julio, se analizará detalladamente qué rubros podrán volver a la actividad de acuerdo a la realidad epidemiológica de cada jurisdicción. “Cuando en la Ciudad abrimos comercios, en Provincia abrieron industria y hoy continúan abiertas, bien protocolizado, y nosotros no tenemos abiertos los comercios”, diferenciaron en el equipo del jefe de Gobierno porteño.
El vicejefe Diego Santilli adelantó que se abrirían más comercios y volvería la actividad deportiva en CABA. “A partir del 18 se debería empezar a recuperar comercios esenciales o industrias con protocolo y, paulatinamente, ir incorporando otras actividades con protocolo, e incluso la actividad deportiva”. Días atrás se filtró un cronograma de 12 etapas diseñado por el Gobierno de la Ciudad planificando la eventual apertura. Si bien Rodríguez Larreta avisó que había pedido que no se filtre esa información, lo cierto es que el Gabinete porteño viene trabajando desde hace más de una semana en la reapertura de actividades al mismo nivel que se encontraba antes del 1 de julio: es decir reapertura de unos 70 mil locales y la vuelta de los runners. Restan otros encuentros antes de definir el futuro de la cuarentena. En los próximos días se reunirán los ministros de Salud, Fernán Quirós y Daniel Gollán, y los equipos técnicos de ambas jurisdicciones, antes del encuentro final con Alberto Fernández para ultimar detalles del anuncio oficial. En la Ciudad, se analizó la posibilidad de que abran las peluquerías en el corto plazo, las industrias no esenciales y los comercios en zonas denominadas de “alto riesgo”. Y que más temprano que tarde se habiliten las reuniones sociales reducidas. En las siguientes etapas están contemplados los shoppings, los gimnasios, entre otras actividades. En tanto, desde el Ministerio de Salud bonaerense adelantaron que la idea es retomar a la fase 3 e ir permitiendo de a poco determinadas flexibilizaciones siguiendo muy de cerca el aumento de casos de COVID-19 en relación al porcentaje de ocupación de camas de terapia intensiva. En principio la idea es sostener la reapertura sin tener que retroceder nuevamente a fase 1, aunque ello dependerá de cómo avance la curva de contagios.