El Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, confirmó que la Ciudad presentará un amparo ante la Corte Suprema para defender las clases presenciales. Larreta rechazó no sólo el cierre de las escuelas, sino también la posible intervención de las fuerzas federales en el territorio de la ciudad de Buenos Aires. Durante toda la mañana Larreta estuvo reunido con su gabinete reducido y evaluó distintas opciones en el plano judicial. Se estudió una acción declarativa de inconstitucionalidad ante la Corte Suprema por la competencia originaria, con una medida cautelar para que la decisión, si la hay, tenga efecto inmediato. También se habló de una presentación ante el fuero Contencioso Administrativo de la Ciudad o ante el Contencioso Administrativo Federal. Pero finalmente será por la vía del amparo. “Hasta que se publique el DNU vamos por ese camino, si algo cambia, la estrategia se puede modificar”, dijo un funcionario porteño. Las autoridades de la Ciudad se apoyarán en el artículo 6 de la Constitución de la Ciudad que determina que las autoridades “tienen mandato expreso, permanente e irrenunciable del Pueblo de la Ciudad, para que en su nombre y representación agoten en derecho las instancias políticas y judiciales para preservar la autonomía y para cuestionar cualquier norma que limite la establecida en los artículos 129 y concordantes de la constitución nacional”. El jefe de gobierno porteño está en contacto desde anoche con distintos gobernadores y hubo consultas con especialistas externos en Derecho. “No se descarta ninguna posibilidad”, dijo a media mañana un funcionario del entorno de Larreta. La decisión de ir a la Corte Suprema reflota el escenario por el recorte en los fondos de la coparticipación federal. En ese caso, la Ciudad presentó un amparo contra el DNU y luego hizo otra presentación cuando se aprobó la ley en el Congreso. La decisión de mantener abiertas las escuelas se respalda en la baja incidencia de contagios que registraron en los dos primeros meses de clases. Otro punto de conflicto es la posible intervención de las fuerzas federales (Prefectura, Gendarmería y PSA) en las calles de la Ciudad. “El Poder de Policía lo tiene la Ciudad salvo que el decreto nacional diga que hay una intervención federal. No se pueden llevar puesta la Constitución nacional y la de la Ciudad. La intervención de las fuerzas federales es de imposible cumplimiento desde lo legal y lo práctico”, aseguró un funcionario porteño. La ministro de Seguridad de la Nación Sabrina Frederic, dijo que hubo contactos con la Ciudad y hasta mencionó al secretario de Seguridad Marcelo D’Alessandro. Fernández en declaraciones mediáticas esta mañana dijo: “No me importa si la Policía de la Ciudad no quiere intervenir”. La frase explotó en las oficinas de Uspallata. En la Ciudad ratifican por estas horas que las fuerzas federales no pueden patrullar por las calles de la Ciudad y sólo pueden actuar en estaciones de trenes, en los accesos y en lugares como la Villa 21-24 y el barrio 31, donde hay acuerdos con la Ciudad. Alberto Fernández deslizó en la misma entrevista que la Policía de la Ciudad no actuaba en las calles para hacer cumplir las restricciones nocturnas anunciadas el viernes de la semana pasada. “Por ese motivo decidí que esto se cumpla con las fuerzas federales, todo el mundo tiene mi número de celular y el fin de semana no fueron pocos los vecinos que me mandaban fotos de Palermo con todos los bares abiertos”, dijo.