La polémica Wanda Nara, llegó al país junto a sus hijos Valentino, Constantino, Benedicto, Francesca e Isabela y su amigo Kennys Palacios. Su marido Mauro Icardi, postergó su viaje porque tiene unos compromisos que cumplir con el PSG, pero vendrá a la Argentina previo a las fiestas para pasarlas en familia. En su llegada, la mediática revolucionó el aeropuerto. La gente se acercó y le gritó “Wanda goleadora” y “grande, Wanda”. Siempre amable, ella conversó con todos y posó para las cámaras. En diálogo con la prensa se refirió a su entrevista con Susana Giménez y aclaró que no le pagaron para hacer la nota, sino que fue una decisión suya a fin de poder dar su versión de los hechos. Además, destacó que lo hizo con la diva porque se siente cómoda y que está muy contenta con el resultado. Consultada acerca de si tiene previsto reunirse con la China Suárez, en principio la tercera en discordia, lo descartó por completo. Finalmente se retiraron en dos camionetas Trafic Vans negras: en una iba todo el equipaje familiar, y en la otra viajaban Wanda, los chicos y Kennys.