En un suceso que conmocionó a Rusia y al mundo entero, un avión privado Embraer-135 (EBM-135BJ) se estrelló en la región de Tver, cerca de Moscú, dejando un saldo de diez personas fallecidas. Entre las víctimas se encuentra Yevgueni Prigozhin, el controvertido líder del Grupo Wagner, una empresa militar privada conocida por sus operaciones en diversas zonas de conflicto. La agencia de aviación civil, Rosaviatsia, confirmó que el avión transportaba a diez ocupantes y que no hay sobrevivientes. Las autoridades del Ministerio para Situaciones de Emergencia de Rusia lograron recuperar ocho cadáveres, pero debido a la intensidad del incendio que se desató tras el impacto, los cuerpos quedaron completamente carbonizados, lo que podría requerir pruebas de ADN para su identificación definitiva. Yevgueni Prigozhin, también conocido como el “jefe de la milicia Wagner”, era una figura polémica en Rusia. El líder mercenario ganó notoriedad en junio pasado al protagonizar una rebelión armada contra el Kremlin, lo que lo colocó en el centro de la atención pública y política. Su presencia en el avión siniestrado generó especulaciones sobre la causa del accidente, aunque las autoridades aún no han emitido conclusiones definitivas al respecto. El canal de Telegram “Grey Zone”, asociado con los mercenarios del Grupo Wagner, confirmó la trágica noticia de la muerte de Prigozhin y su principal colaborador, Dmitri Utkin. En un comunicado, afirmaron que Prigozhin había fallecido debido a las “acciones de los traidores de Rusia”. El Grupo Wagner ha estado involucrado en diversas operaciones militares en conflictos internacionales, lo que ha suscitado controversia y debate sobre su papel y sus motivaciones. La Casa Blanca en Estados Unidos reaccionó a la noticia con calma. Un portavoz declaró que la muerte de Prigozhin “no sería una sorpresa para nadie”, dado su historial y sus acciones previas.
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