Tras el revés experimentado con la Ley Ómnibus, el Gobierno se encuentra en la fase de elaboración de la reglamentación de un decreto destinado a desregular las obras sociales vinculadas a los sindicatos. De acuerdo con información provista por fuentes cercanas, se prevé que la normativa sea publicada en el Boletín Oficial durante esta semana. El propósito central de esta medida es otorgar “libertad de elección a los beneficiarios” y fomentar la “libre competencia entre obras sociales y prepagas”. En la gestación de este decreto, una vez más, se encuentran los asesores Federico Sturzenegger y Santiago Caputo, en colaboración con el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y otros miembros del círculo de confianza de Javier Milei. “Los trabajadores podrán optar libremente entre las obras sociales o cualquier empresa de medicina prepaga. Adicionalmente, ya no será obligatorio que el beneficiario permanezca un año en la obra social de su actividad al iniciar un nuevo empleo en relación de dependencia”. Uno de los aspectos fundamentales del decreto 70/23 es la eliminación de la intermediación al realizar la derivación de aportes por parte del beneficiario. En detalle, se establece que el trabajador podrá elegir una prepaga sólo una vez al año, en cualquier momento desde el inicio de la relación laboral. Por otro lado, se estipula que las empresas de medicina prepaga deberán contribuir al Fondo Solidario de Redistribución con el monto total de la cuota que perciben. Esta decisión marca un nuevo episodio en el agravamiento del conflicto entre el Gobierno Nacional y los sindicatos, acentuado por el fracaso en las negociaciones sobre el salario mínimo. En simultáneo, las empresas de medicina prepaga anunciaron un aumento promedio del 23% en las cuotas para marzo, respecto al valor de febrero. Este constituye el tercer incremento consecutivo en lo que va del año, en un intento de las entidades por recuperar el rezago del 2023, período en el cual los planes de salud experimentaron un aumento del 134%, mientras que la inflación cerró en un 211,4%. Cabe destacar que esta actualización de tarifas se produce en un contexto en el que el Gobierno decidió no intervenir en los precios, permitiendo que las empresas no tengan límites en la diferencia entre los costos de los planes para personas más jóvenes (más económicos) y el resto. En lo que va de 2024, los usuarios de las prepagas han enfrentado incrementos del 30% en enero y del 26% en febrero.
DESREGULARÁN LAS OBRAS SOCIALES
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