La tensión entre el Ejecutivo y la facción opositora alcanza su punto más crítico. Desde el fracaso de la votación de la Ley Ómnibus, los conflictos aumentaron, acercándose a un punto sin retorno. Los legisladores de Unión por la Patria rechazaron la expresión “nido de ratas” utilizada por el presidente Javier Milei para referirse al Congreso, instándolo a mostrar “respeto” por las instituciones democráticas. El líder del bloque kirchnerista en la Cámara de Diputados, Germán Martínez, propuso que la mejor manera de repudiar la agresión de Milei al Congreso “es rechazar el mega Decreto de Necesidad y Urgencia”, a la vez, señaló que los tuits y comunicados “carecen de significado si no se actúa en el Congreso para revertir el atropello a sus facultades”. La diputada Victoria Tolosa Paz defendió al Congreso “como uno de los pilares fundamentales de la República” y desafió a Milei a honrar su papel como presidente en la apertura de sesiones ordinarias el 1° de marzo. Otras legisladoras, como Carolina Gaillard y Cecilia Moreau, subrayaron la importancia del respeto a las instituciones democráticas y recordaron el respaldo de millones de votantes. El senador radical Pablo Daniel Blanco presentó un proyecto para “repudiar” las declaraciones de Milei y solicitó una “retractación pública”, subrayando que las palabras del presidente dañan la institución democrática. Blanco enfatizó que un gobierno “cesarista, místico o totalitario” tiende a descalificar a aquellos que discrepan, sin respetar la división de poderes. Instó a evitar la confrontación y promover el diálogo en lugar de profundizar las diferencias. En una línea similar, el diputado aliado Ricardo López Murphy expresó su respeto por la investidura presidencial y se abstuvo de dar una respuesta más contundente. Destacó su compromiso con la patria y su enfoque en cuestiones importantes, evitando personalizar conflictos.
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