Después de meses de especulaciones, se confirmó que Malena Galmarini, líder del Frente Renovador, no asumirá la presidencia del Grupo Provincia, a pesar de que la oferta había sido realizada por Axel Kicillof en diciembre y oficialmente comunicada. Aunque se especuló con el ingreso de Galmarini como funcionaria provincial, la designación nunca se materializó, lo que generó rumores sobre una posible tensión entre Sergio Massa y Axel Kicillof. Sin embargo, el diputado bonaerense Rubén Eslaiman, uno de los más cercanos a Massa, desmintió estas suposiciones. Eslaiman afirmó en su cuenta de X que “Malena rechazó el BAPRO en enero y el gobernador pidió que no se hiciera público. También le ofrecieron la Fundación Banco Provincia, pero lo rechazó porque desea ejercer la política sin condicionamientos. Además, se solicitó que esto no se hiciera público. Es lamentable que algunos intenten sembrar discordia porque están en retirada. Algunos no necesitan un cargo para hacer política”. El entorno de Galmarini confirmó esta información y dejó en claro: “Malena no busca favores. Se dedica a la política y se siente igual de cómoda en la base que ocupando un cargo institucional. Su enfoque está en la organización partidaria, en descansar después de 20 años de actividad sin pausa y en recuperar su salud. Sin embargo, nada de esto significa que se quede en casa. Todo lo contrario. Está comprometida al máximo y continúa buscando soluciones creativas para problemas de larga data”. Así, la esposa de Sergio Massa se encontrará temporalmente sin ningún cargo, centrada al 100% en reconstruir el Frente Renovador en su nuevo papel como oposición al gobierno de Javier Milei.
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