Javier Milei decidió declinar la invitación para ingresar a los BRICS, prefiriendo centrar sus esfuerzos en unirse a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Esta decisión generó críticas dentro del país, especialmente de figuras como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien manifestó su desacuerdo buscando minimizar las consecuencias de esta política. Durante el I Congreso de Sinólogos Latinoamericanos, organizado por la Universidad Nacional de José C. Paz (UNPAZ), Kicillof, en compañía del embajador de China en Argentina, Wang Wei, y el exembajador de Argentina en China, Sabino Vaca Narvaja, expresó su desacuerdo con la decisión del gobierno nacional. En sus declaraciones, el gobernador calificó de “bochornosa” la decisión de no incorporarse a los BRICS, argumentando que la política exterior de Milei está condicionada por “anteojeras dogmáticas e ideológicas”. Kicillof reafirmó la “vocación de la provincia de Buenos Aires” de unirse al bloque de países emergentes en cuanto sea posible, destacando los esfuerzos que ha realizado desde principios de año para fortalecer las relaciones entre la provincia y los miembros fundadores de los BRICS, como China, India y Brasil. Además de su intención de integrar a la provincia en el bloque, el gobernador subrayó su compromiso de profundizar los vínculos con China desde una perspectiva de respeto mutuo y beneficio compartido. En este sentido, Kicillof destacó la importancia de generar proyectos de inversión china en Argentina como una de las formas de fortalecer la cooperación bilateral. Esta postura plantea un escenario en el que la provincia de Buenos Aires podría buscar mayor independencia en su política exterior, desmarcándose de las decisiones del gobierno nacional y reafirmando su propio camino en el ámbito internacional.
¿LA PROVINCIA A LOS BRICS?
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