El presidente Donald Trump prorrogó hoy por un año la declaración contra Nicaragua como “una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos, debido al “desmantelamiento de las instituciones democráticas” por parte del gobierno de Daniel Ortega y por la represión a las protestas.
“La emergencia nacional declarada el 27 de noviembre de 2018 debe seguir vigente más allá del 27 de noviembre de 2019, dijo Trump en un comunicado difundido por la Casa Blanca.
También denunció “el sistemático desmantelamiento de las instituciones democráticas y el Estado de Derecho por parte del régimen de Ortega”, así como a su “uso indiscriminado de la violencia y sus tácticas represivas contra civiles”, además de “la corrupción que ha llevado a la desestabilización de la economía de Nicaragua”.
En este tiempo, Estados Unidos ha dictado numerosas sanciones contra altos cargos del gobierno nicaragüense, incluidos Ortega y su mujer y vicepresidenta, Rosario Murillo, por violaciones de los Derechos Humanos y corrupción.