El Gobierno de Joe Biden inició una nueva campaña publicitaria destinada a disuadir a los migrantes latinoamericanos de cruzar la frontera hacia Estados Unidos. La campaña se lanza en medio del aumento de patrullas del Departamento de Seguridad Nacional en localidades fronterizas como El Paso, Texas. La iniciativa coincide con el levantamiento del Título 42, una norma que permitía la expulsión inmediata de migrantes que cruzaban la frontera de manera irregular por motivos de salud pública. A partir de ahora, se aplicará el Título 8, la norma que ha regido la migración históricamente en Estados Unidos, pero con nuevas medidas que restringen el acceso a la solicitud de asilo en la frontera con México. Los migrantes que crucen de manera irregular la frontera y que no hayan pedido protección en un tercer país durante su viaje hacia Estados Unidos serán considerados “no aptos” para solicitar asilo. La campaña publicitaria se llevará a cabo en países como Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador y Colombia, y también se difundirán los mensajes “a lo largo de la ruta migratoria y en las plataformas de redes sociales más populares entre los migrantes”. Los mensajes de la campaña advierten de las consecuencias de entrar ilegalmente en Estados Unidos y se dirigen directamente a los migrantes y a los contrabandistas de personas. “El coyote nos estafó. Entrar ilegalmente en EE. UU. es un delito. Dígale no al coyote”, se puede leer en uno de los mensajes. La campaña también informa de las nuevas medidas y de las consecuencias para aquellos que intenten entrar ilegalmente en el país. “Las leyes migratorias de Estados Unidos se endurecieron. El Gobierno de Estados Unidos está haciendo cambios para aumentar las consecuencias por ingreso ilegal al país, comenzando el 12 de mayo”, dice uno de los mensajes. Las consecuencias incluyen la deportación, una prohibición de reingreso de 5 años y el enjuiciamiento de infractores reincidentes.
EEUU ENDURECE POLÍTICAS MIGRATORIAS
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