El presidente de Estados Unidos Donald Trump dio un nuevo giro en su recomendación de países para integrar la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En este caso se decidió por apoyar a Brasil por sobre Argentina en el acceso a la organización internacional. La decisión tiene un trasfondo político: el arribo del presidente Alberto Fernández al sillón de Rivadavia en lugar de Mauricio Macri fue el argumento que terminó de inclinar la balanza a favor del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con quien la Casa Blanca tiene mayor afinidad.
La noticia no generó preocupación en el entorno de Fernández, sobre todo a raíz del contexto económico que atraviesa el país en medio de la emergencia económica. Ser miembro de la OCDE implica cumplir con ciertas pautas y requisitos muy estrictos en materia económica. En marzo, Trump dijo en una conferencia de prensa conjunta con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en la Casa Blanca, que apoyaba que Brasil se uniera al grupo de 36 miembros. Y en julio, el secretario de Comercio de EE.UU., Wilbur Ross, reiteró el respaldo de Washington a Brasil durante una visita a San Pablo.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es una organización internacional cuya misión es diseñar mejores políticas para los países que la integran. El objetivo que tiene es promover políticas que favorezcan la prosperidad, la igualdad, las oportunidades y el bienestar. Trabaja en colaboración con gobiernos para establecer estándares internacionales y proponer soluciones a problemas sociales, económicos y medioambientales.