GOBIERNO: “NO HABRÁ CORTES DE LUZ”

En medio de crecientes preocupaciones por la estabilidad del suministro eléctrico durante el verano, el Gobierno nacional aclaró que “no habrá cortes de luz programados en los hogares”. El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, aseguró que los posibles cortes sólo afectarían a las industrias bajo acuerdos voluntarios, con el fin de aliviar la red eléctrica. Rodríguez Chirillo precisó que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, al referirse a interrupciones del suministro, hablaba exclusivamente de cortes acordados con sectores productivos: “En ningún momento se está hablando de cortes en residenciales. Nada de eso va a ocurrir”, señaló el funcionario nacional. El plan de la Secretaría de Energía busca incentivar a las industrias a reducir voluntariamente su consumo en momentos críticos. “A una empresa grande se le avisa desde ahora que puede reducir su carga en verano, y se le remunera por no contratar tanta potencia”, explicó Rodríguez Chirillo, destacando que esto no implica cortes obligatorios, sino un esquema de remuneración para quienes participen. A pesar de que Francos había advertido sobre posibles cortes si la demanda eléctrica aumentaba debido a un verano muy caluroso, Rodríguez Chirillo negó que se esté planificando un esquema de cortes rotativos como el de 1988. “No creemos que vaya a ocurrir algo similar”, subrayó el secretario. Además, el Gobierno trabaja en asegurar la importación de energía desde Brasil. Rodríguez Chirillo viajará al país vecino para concretar la adquisición de 2300 megavatios, lo que brindaría mayor tranquilidad en caso de un pico de demanda: “Estamos haciendo las gestiones para garantizar que esa energía esté disponible”, confirmó el funcionario. Fuentes del sector energético indicaron que se evalúan otras alternativas para evitar un colapso del sistema en los meses de mayor calor. Estas incluyen, además de la importación, la posibilidad de retrasar obras en la central nuclear Atucha I, que está programada para salir de servicio a fin de septiembre. Aunque aún no se cerró un plan definitivo, el Gobierno busca asegurar la estabilidad del sistema ante un verano que se anticipa más caluroso que lo habitual.