Con expectativas de continuidad en el proceso de desinflación, los analistas proyectan que la inflación de diciembre cerrará alrededor del 2,5%, una cifra similar a la registrada en noviembre. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) el próximo 14 de enero. Según las estimaciones, el 2024 podría finalizar con una inflación anual cercana al 120%. Sin embargo, el panorama inflacionario muestra una marcada desaceleración desde inicios del año, cuando se registró un 20,6% en enero. Los números han caído progresivamente: en noviembre, la cifra fue del 2,4%. La consultora Equilibra estimó un IPC de 2,6% para diciembre, destacando el impacto de las subas en precios estacionales y la caída en rubros como autopartes y bienes durables, tras la eliminación del impuesto PAÍS el 22 de diciembre. Por su parte, Analytica proyectó un incremento del 2,4%, señalando la incidencia del precio de los alimentos (3,2%), especialmente en productos como snacks y salsas (8,1%), carnes (6,5%) y aceites (6,2%). En tanto, Orlando JF y Asociados indicó una proyección entre el 2,3% y el 2,5%, mientras que LCG anticipó una inflación de 2,2%, subrayando el efecto moderador de los menores ajustes en bienes regulados y la flexibilización de las importaciones. Pese a estas proyecciones, el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) fue más pesimista, situando el IPC en 2,9% para diciembre y una variación interanual de 118,8%. La reducción inflacionaria ha sido influida por políticas de control de precios y ajustes macroeconómicos, aunque los especialistas advierten que el éxito del proceso de desinflación dependerá de la estabilidad cambiaria y la consolidación de la recuperación económica.
INFLACIÓN: SEGUIRÍA A LA BAJA
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