El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, protagonizó una conferencia de prensa con un fuerte mensaje hacia el gobierno nacional, defendiendo los recursos de su territorio y acusando al Ejecutivo de tener intenciones políticas detrás del recorte presupuestario para perjudicar y llevar a los porteños “al límite del sometimiento”. Rodríguez Larreta afirmó que el kirchnerismo busca recortar los fondos que la Nación gira a la Ciudad, para financiar a la Policía. El alcalde destacó la importancia del rol que cumple la fuerza en el control del delito. “Una diputada del oficialismo manifestó que nuestra autonomía es reversible. ¿Esto qué quiere decir?, ¿Quieren sacarle la Policía a la Ciudad? ¿Quieren sacarle la Seguridad a la gente para que la calle sea tierra de nadie y que barrabravas violentos puedan tomar la Casa Rosada como el otro día?”, se preguntó. Larreta sentenció: “La Policía de la Ciudad es una fuerza profesional, muy bien equipada y entrenada, que con mucho esfuerzo y trabajo logró bajar los delitos en la Ciudad a los niveles más bajos en mucho tiempo. Tenemos que seguir mejorando. Pareciera que quieren desfinanciar, o incluso quebrar a la Ciudad para llevarla al límite del sometimiento”. Sobre lo que implica la quita de dinero, detalló: “Los 65.000 millones de pesos que la Ciudad deja de percibir se traducen directamente en el 88% del presupuesto de salud. Equivale a menos patrulleros. Equivale a la construcción de 217 escuelas primarias, a 13.000 viviendas nuevas en barrios populares; a la construcción de 475 kilómetros de cloacas y pluviales; a la construcción de obras y al mantenimiento del espacio público”.
Larreta anticipó que la respuesta de la Ciudad será la misma que cuando el Gobierno anunció el primer recorte de coparticipación para favorecer a Axel Kicillof: llevar la disputa a la Corte Suprema. Por eso, le mandó un mensaje al máximo tribunal para que acelere sus tiempos ya que, según explicó, “desde el 10 de septiembre la Ciudad dejó de percibir más de 10.000 millones de pesos y esto no se va a detener hasta que el decreto se declare inconstitucional. Tal vez se esperaba que desde la Ciudad juguemos el mismo juego, elevemos el tono de la confrontación y empecemos una disputa política o lo llevemos a una pelea personal. Pero no. No elegimos ese camino. Siempre vamos a elegir la institucionalidad por sobre la disputa política, porque esos son nuestros valores y nuestros valores son innegociables”, sostuvo sobre la decisión de recurrir a la Justicia. “Necesitamos que la Corte se manifieste para restablecer el federalismo que se quebró. Porque hoy es la Ciudad pero mañana puede ser cualquier otra provincia”. El alcalde porteño criticó la intención del Gobierno de querer firmar un Consenso Fiscal que le quite el derecho a la Ciudad de litigar contra el Estado, algo que lo dejaría fuera de juego en sus reclamos ante la Corte. En este punto fue cuando denunció una “intención política” de parte de la Casa Rosada. “El decreto, ahora la ley; el Consenso Fiscal y la denuncia penal que nos metieron por los episodios durante el velorio de Diego, se suman a ataques políticos a la Ciudad y a mi mismo en forma personal. Todo esto muestra que hay una clara intención política. Y no es que me afecte a mi, a la Ciudad o a los porteños. Esto afecta a toda la Argentina. Porque este camino sólo profundiza la grieta que tanto mal le ha hecho a nuestro país. Ahora, no cuenten conmigo para agrandar esa grieta”, expresó. “No hay antecedentes de tanta premura ni tanta improvisación”.